En este tercer episodio, el psicólogo y podcaster Juan Pablo Molina, entrevista a Jone Martínez Bacaicoa, Psicóloga General Sanitaria e Investigadora en el Departamento de Psicología Biológica y de la Salud de la Universidad Autónoma de Madrid, para hablar, como experta, de los juegos y apuestas online así como sus riesgos en la adolescencia. La parte social de la temática es abordada por el antropólogo Álvaro Muela.

El juego forma parte de los seres humanos, siendo crucial en la etapa infantil ya que es un medio de aprendizaje y socialización. A través del juego los niños y niñas van adquiriendo conductas cognitivas; desarrollan habilidades sociales como la comunicación, el respeto a los demás o a seguir normas; exploran y descubren el medio que les rodea además del desarrollo emocional, entre otras muchas cosas. Asimismo, el juego se va transformando a medida que avanza la edad, pues los adolescentes, jóvenes y adultos también juegan pero desde una función social, es decir, para relacionarse con los demás, pertenecer a un grupo o simplemente como diversión. Sin embargo, cuando la relación que se crea con el juego no es adecuada puede llegar a convertirse en un problema.

Según el Estudio de Prevalencia de Juego 2022-2023 elaborado por la Dirección General de Ordenación del Juego del Ministerio de Consumo, el 36,5% de los jóvenes de entre 18 y 25 años que ha jugado el último año ha participado en apuestas online y, de ellos, un 12,45% ha desarrollado síntomas de problemas con el juego.

La ludopatía o el juego patológico es un problema de salud pública que afecta a personas de todas las edades, pero sobre todo es alarmante en lo que respecta a los jóvenes y adolescentes, siendo éstos especialmente vulnerables debido a su falta de experiencia y madurez emocional. Por esta razón, contamos con la contribución de la psicóloga Jone Martínez Bacaicoa, para abordar las consecuencias y los riesgos que suponen los juegos y apuestas online en los adolescentes.  

Actualmente, este tipo de conductas de juego se ha normalizado sobre todo entre los más jóvenes como resultado de la publicidad y su fácil acceso a través de internet. Bien es cierto que el Real Decreto 958/2020, 3 de noviembre, de Comunicaciones Comerciales de las Actividades de Juego  limitó los anuncios a “horario de adultos” e intenta proteger a los menores, no obstante, las secuelas de los años anteriores siguen permaneciendo entre los jóvenes.

Junto a dichas limitaciones, también se restringió el uso de rostros conocidos o las promociones para jugar, sin embargo el control en internet aún es difícil. Ejemplo de ello puede ser el caso de la moda de las apuestas deportivas online, influenciada por las personas llamadas tipsters, supuestos expertos en la pronosticación de apuestas deportivas que se dedican a predecir los resultados de las competiciones. Los tipsters crean canales de difusión a través de las redes sociales u otras vías para que los jóvenes lo sigan mediante una cuota mensual a cambio de sus pronósticos deportivos con el fin de ganar dinero. Tienen cada vez más seguidores que a su vez, son más jóvenes. Además, muchos de estos “influencers” están vinculados con las casas de apuestas.

Ésta no es la única vía, también existen Canales en Youtube (cuyo acceso es gratuito), en los que se habla de estrategias y trucos para ganar dinero mediante juegos, apuestas o inversiones. Algunos ejemplos son Clopez Picks  con 48 mil suscriptores, en cuyos vídeos habla sobre las apuestas, o Adrián Saenz  con 1,84 millones suscriptores, donde se habla de negocios e inversiones para ganar dinero.

Aunque lo mencionado anteriormente no sea una publicidad directa, sí muestra la influencia que tiene la cultura del éxito sin esfuerzo entre los adolescentes, así como, su vulnerabilidad para ser “captados”, aspecto este que señala la psicóloga Martínez: los adolescentes son mucho más vulnerables, primero porque está diseñado para ellos y lo segundo es porque están en un momento vital en el que todavía no han desarrollado la capacidad de anticipar las consecuencias que todo esto puede tener, además son muchos más sensibles a las opiniones ajenas, a lo que hace el resto del grupo.

El juego patológico obstaculiza la vida de la persona a causa de sus consecuencias que abarcan diferentes ámbitos:

• Psicopatológicas: tristeza, ansiedad, depresión, irritabilidad
•  Familiares: desatención familiar, falta de comunicación, etc
• Laborales y académicas: disminución en el rendimiento, desmotivación, abandono de los estudios…
• Sociales: desatención de las amistades, disminución de las actividades de ocio, pérdida de relaciones significativas, etc.
• Consumo de sustancias: uso y abuso de tabaco, alcohol u otras sustancias adictivas
•  Económicas: deudas y problemas de dinero

 Por otro lado, la sociedad y las instituciones también tienen su responsabilidad en esa normalización de los juegos de azar, pues sigue siendo común encontrar publicidad por ejemplo de la ONCE, mostrar los resultados y premios de los juegos del Estado en algunos medios de comunicación o algo tan “tradicional” como la lotería de Navidad. A esto también hace referencia Jone Martínez, poniendo de manifiesto que “la asociación entre jugar y ganar dinero es una asociación que está construida socialmente, es decir, la sociedad a través de la publicidad, famosos, influencers e incluso de compañeros que empiezan a jugar, nos dice que haciendo esto puedes ganar dinero, es algo que la sociedad te enseña”.

Por tanto, aunque sea una adicción sin sustancia y no resulte tan fácil detectarlo, es necesario advertir de los riesgos que puede conllevar este tipo de conductas desde pequeños, enseñar un uso adecuado de las TIC, tener un mayor control de acceso, la adicción que puede crear en determinadas personas, dotar a los jóvenes de herramientas para comprender lo que les pasa y, sin lugar a dudas, fomentar una comunicación adecuada en el ámbito familiar para otorgar la suficiente confianza a los hijos e hijas para pedir ayuda cuando lo necesiten, o preguntarles, en caso de detectar alguna señal de alarma. Todo ello es necesario para la prevención de estos comportamientos porque como dice la psicóloga Jone, “jugar es muy accesible, los niños desde muy pequeños tienen acceso a los juegos y videojuegos online, entonces desde muy temprano pueden comprobar que estar en un juego les sirve para no estar en otras cosas que quizás les genera malestar”.vvvvvvv

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OTROS PROBLEMAS EMOCIONALES EN ADOLESCENTES PDC2021-121882-I00, financiado/a por MCIN/ AEI/10.13039/501100011033/ y por la Unión Europea “NextGenerationEU”/PRTR.

REFERENCIAS:

Chóliz, M. y Marcos, M. (2019) La epidemia de la adicción al juego online en la adolescencia: un estudio empírico del trastorno de juego. Revista española de drogodependencias, Nº. 44, Vol. 4, págs. 20-37

Galmes Cerezo, Mª., Maestro Espínola, L. y Carcelén García, S. (2022) La autorregulación en las plataformas de juego de azar online. Estrategias de marketing y responsabilidad social ante los jóvenes. VISUAL REVIEW: International Visual Culture Review / Revista Internacional de Cultura Visual, Vol. 10, Nº. 2, págs. 1-17 https://doi.org/10.37467/revvisual.v9.3598

Rubio García, L. (2018) Apuestas deportivas online: percepción adolescentes y regulación publicitaria. methaodos. Revista de ciencias sociales, Vol. 6, Nº. 1, págs. 139-148  http://dx.doi.org/10.17502/m.rcs.v6i1.207

Vázquez Fernández, Mª. Josefa. y Barrera Algarín, E. (2020) El juego online en España y las apuestas deportivas: los jóvenes como nuevos perfiles con ludopatía. Health and addictions: salud y drogas, Vol. 20, Nº. 2, págs. 61-69 https://doi.org/10.21134/haaj.v20i2.500